“No fui duro al calificar de ‘gallinas’ a los cachacos”
El costeño Juan José Sierra, eliminado en el ‘Desafío’.
Por Nístar Romero Acosta (EL HERALDO, Barranquilla)
La eliminación el pasado domingo de ‘Juanjo’ (Juan José Sierra) del ‘Desafío de regiones’ logró despertar la solidaridad de muchos seguidores de este reality del Canal Caracol, porque siempre lo vieron como el candidato ideal para ganar el premio. Sin embargo, su fuerza competitiva, como lo reconocieron los otros finalistas al momento de la votación, fue la causa para que hoy esté fuera del juego. Este joven nacido en San Pelayo (Córdoba) fue el gran capitán del equipo de los Costeños y su mayor orgullo es haber mantenido esa bandera en alto todo el tiempo.
¿Se imaginó que la gente le tenía tanto cariño y que era su favorito?
Uno piensa muchas cosas, sobre todo cuando uno dice cosas y no sabe cómo van a recibirlas. Pero hoy que estoy fuera del juego siento una emoción grande al encontrarme con tantas expresiones de cariño. Por todos ellos me hubiera gustado ganar.
¿Fue muy duro al tildar a los cachacos de ‘gallinas’?
Para nada, además yo no los traté de ‘gallinas’ en el sentido que sintieran miedo, sino que es una forma de uno decir las cosas cuando se está jugando.
¿Usted salió del juego porque los cachacos lo consideraban el gran enemigo a vencer?
No, eso nunca lo pensé, ni tampoco porque fuera enemigo de ellos. Yo hice mi juego y salí porque así Dios lo quiso, uno no llega hasta donde uno quiera sino hasta donde Dios lo disponga. Miren todo lo que hicimos por sacar a Miriam (la otra costeña participante) y aún sigue en el juego.
¿Esa obsesión de sacar a Miriam también no fue contraproducente?
No creo, porque realmente tuve oportunidad de sacarla y no lo hice.
¿Por qué no se la llevó bien con las mujeres de su equipo?
Lo que pasaba era que siempre que hacíamos algo en grupo ellas aportaban muy poco o nada y perdíamos. Eso además hizo difícil la convivencia.
¿Cree usted que en el Desafío nunca ganan las personas competitivas?
Realmente no es que no lo ganen personas competitivas, lo que pasa es que las personas competitivas salen y las que no lo son se van quedando en el juego y finalmente terminan ganando.
¿Todos decían que usted era el más fuerte?
No sé si soy el más fuerte, pero sé que fui el que más corazón le metió a esto. Cada prueba era como estar en la final y no podía darme el lujo de descansar.
¿Cuál fue el momento más cruel, más difícil?
Una de las pruebas de capitanes, la de cargar un tronco, fue demasiado esfuerzo, realmente quedé muy maltratado. También fue difícil convivir con mis compañeras costeñas.
La despedida de su compañero Juan Pablo fue conmovedora y se dice que muchos televidentes lloraron...
En el paisa encontré al verdadero amigo y un hermano más. Ha sido muy bueno y en él tenemos aún un representante costeño, porque así lo siente. El decía que era un paisa-costeño y siempre preguntaba palabras para imitarnos.
Qué espera de su participación en el Desafío de regiones?
Espero que me pasen muchas cosas buenas, que la gente me quiera y me disculpen si a veces era muy frentero, pero soy así y quería que el equipo ganara o por lo menos ‘morir'’ en el intento. En todo caso todo esto se lo debo a Dios y si llegué hasta aquí fue porque él lo dispuso así.
¿Cuál es su próximo desafío?
Seguir mi carrera de Derecho en la Universidad del Sinú, donde curso tercer semestre. A ver si todavía tengo novia, creo que me dejó (risas...).
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